
Por Lucero Díaz Estrada/ Enlace Informativo
El fuego no da tregua en Uruapan. Desde la mañana de este miércoles, un devastador incendio forestal ha arrasado con parajes enteros desde Matanguarán hasta el cerro del Manguito, de Arroyo Colorado y se extiende al basurero municipal.
A pesar de la magnitud de la emergencia, el helicóptero prometido en múltiples ocasiones por el presidente municipal Carlos Alberto Manzo Rodríguez sigue sin entrar en operación.El edil justificó su inacción aérea señalando que “los expertos han recomendado esperar para no entorpecer el valiente trabajo de nuestros héroes en tierra”, asegurando que el helicóptero “entrará en funcionamiento únicamente cuando existan las condiciones adecuadas”.
Sin embargo, esta declaración ha generado inconformidad en sectores de la ciudadanía, quienes recuerdan que Manzo Rodríguez hizo del helicóptero una de sus principales banderas mediáticas, promoviendo su adquisición como una herramienta inmediata para situaciones de emergencia.
Hoy, con más de 160 combatientes luchando cuerpo a cuerpo contra las llamas, la promesa sigue en tierra… o peor aún, en el aire.En las labores participan brigadas y cuerpos de auxilio como Delfines, Fénix, CONAFOR, Protección Civil, Seguridad Pública, Bomberos Voluntarios y Guardia Ciudadana, entre otros. Su esfuerzo es heroico, pero la falta de apoyo aéreo en una zona montañosa y de difícil acceso pone en duda la verdadera operatividad del recurso prometido.
Mientras el presidente municipal llama a la calma y pide a la población no compartir información “no verificada”, la realidad es que las llamas avanzan, los recursos escasean y el helicóptero, “ya listo y a la orden”, no aparece en el cielo uruapense.La ciudadanía se pregunta si el helicóptero fue una inversión real o solo un recurso discursivo.
En medio de una emergencia ambiental de gran escala, lo que menos necesita Uruapan son pretextos.
