-en la colonia Rosa de Castilla, de Uruapan
Uruapan, Michoacán. – Habitantes del andador José Silva Herrera, en el fraccionamiento Rosa de Castilla, en esta ciudad, han manifestado su preocupación por las constantes conductas insalubres y de maltrato animal presuntamente cometidas por una vecina identificada como Maricela “N”, quien reside en esa calle.
Según testimonios vecinales, la semana pasada uno de los perros de dicha persona cayó desde la azotea, y en lugar de darle un destino adecuado, fue enterrado de forma superficial frente a la casa con el número 89 (color azul), dejando expuesto el bulto del cadáver, lo cual ha generado olores fétidos que afectan directamente a la comunidad.
Los denunciantes temen riesgos sanitarios severos si no se atiende esta situación de inmediato.No es la primera vez que se presenta un hecho similar.
Los vecinos señalan que hace aproximadamente dos meses ocurrió otro entierro de un canino en condiciones similares, esta vez justo frente al domicilio de la misma vecina.
Además, se reporta la quema reciente de un colchón, ropa y excremento de perro, dejando residuos visibles como marcas de fuego y un resorte abandonado cerca de áreas verdes.Estas acciones podrían constituir una violación a varias normativas ambientales y sanitarias.
En específico: El Artículo 415 del Código Penal Federal sanciona a quien provoque daños al ambiente mediante el depósito inadecuado de residuos, incluidas sustancias orgánicas en descomposición, con penas de uno a nueve años de prisión y multa, si se pone en riesgo la salud pública.
Asimismo, el Artículo 28 de la Ley General de Equilibrio Ecológico y Protección al Ambiente (LGEEPA) prohíbe actividades que deterioren el entorno urbano, en especial cuando afectan la salud de terceros.
Por otro lado, el Artículo 311 y 350 Ter del Código Penal de Michoacán considera como delito el maltrato animal, incluyendo acciones que causen sufrimiento o trato indigno a los animales, así como el desecho irresponsable de sus cuerpos.
Los colonos hacen un llamado a las autoridades municipales, a la Procuraduría de Protección al Ambiente (ProAm) y a la Dirección de Salud Pública del Ayuntamiento, para que intervengan con urgencia en esta problemática.
Asimismo, invitan a más vecinos a sumarse al reporte colectivo, señalando que ya han intentado dialogar con la responsable sin éxito, y que incluso han recibido actitudes agresivas como respuesta.“Queremos vivir en una comunidad saludable, sin olores nauseabundos, sin riesgo de infecciones, y con respeto a los animales”, concluyen los vecinos, quienes reiteran su petición de apoyo institucional ante esta situación.
